La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) reveló que los cajeros automáticos ubicados en destinos turísticos de México forman parte de una red de lavado de dinero a nivel internacional. Según un informe de la Secretaría de Hacienda, delincuentes extranjeros han creado una empresa dedicada a la compraventa de cajeros automáticos nuevos y usados para copiar los datos de las tarjetas de los usuarios.
Este esquema fraudulento les permite obtener ganancias en efectivo al clonar las tarjetas. La UIF explica que rastrear la ruta del dinero es una de las estrategias clave para combatir la clonación de tarjetas y proteger a los clientes y usuarios.
Los cajeros automáticos involucrados en esta actividad ilegal han generado ventas millonarias mediante el conocido método de skimming, que consiste en robar información de tarjetas a través de un lector camuflado como parte del cajero.
La información recopilada incluye el número de tarjeta y el NIP, que luego se utiliza para clonar las tarjetas y acceder al dinero de los usuarios que utilizan estos cajeros automáticos. Además, se ha descubierto que parte de las transferencias realizadas se enviaron a paraísos fiscales, mientras que los miembros de la organización delictiva adquirieron propiedades e hicieron transacciones con tarjetas, como la compra de vehículos de lujo y participación en apuestas.
La UIF ya ha tomado medidas al respecto y ha presentado una denuncia ante la Fiscalía General de la República (FGR), solicitando el aseguramiento de las cuentas implicadas en esta red de fraude. Estas acciones buscan desmantelar esta operación ilegal y prevenir futuros casos de lavado de dinero a través de cajeros automáticos en destinos turísticos de México.