El gobierno canadiense anunció el viernes que se unirá a las consultas de solución de controversias entre Estados Unidos y México sobre el maíz genéticamente modificado (GM). Esta decisión se produce después de que Washington solicitara las consultas la semana pasada, como parte de un conflicto comercial en el marco del acuerdo comercial de Norteamérica, TMEC.
Las políticas de México para limitar el uso de maíz transgénico, proveniente de Estados Unidos, han sido motivo de preocupación para ambos países. En un comunicado conjunto, Marie-Claude Bibeau, ministra canadiense de Agricultura, y Mary Ng, ministra de Comercio Internacional, afirmaron que Canadá comparte la inquietud de Estados Unidos de que estas medidas no estén respaldadas científicamente y puedan afectar negativamente el comercio en el mercado norteamericano.
Aunque Canadá no es un gran exportador de maíz, sí tiene un importante mercado de canola en México, gran parte de la cual también es transgénica. Si las consultas no logran resolver los desacuerdos en un plazo de 75 días, Washington puede solicitar la intervención de un panel de solución de diferencias.
En marzo, Estados Unidos presentó consultas comerciales formales debido a su oposición a los planes de México de limitar las importaciones de maíz modificado genéticamente y otros productos de biotecnología agrícola. A pesar de las consultas realizadas anteriormente, los funcionarios de alto nivel de la oficina del Representante de Comercio de Estados Unidos (USTR, por su sigla en inglés) informaron que no se ha logrado resolver el problema hasta el momento.