Autoridades peruanas ordenaron el cierre de Machu Picchu y del Camino Inca que conduce al mundialmente conocido sitio arqueológico a partir del sábado, en medio de las manifestaciones civiles que se han extendido por todo el país y han dejado alrededor de 60 muertos.
“(…) se ha dispuesto el cierre de la Red de Caminos Inca y la Llaqta de Machu Picchu, desde el día 21 de enero de 2023 hasta nuevo aviso, para salvaguardar la seguridad de los turistas y la población en general”, informa el comunicado oficial.
El comunicado detalla que “se brindarán todas las facilidades a los turistas nacionales y extranjeros que se vean afectados para el uso de los boletos, desde el 21 de enero hasta un mes después de concluidas las movilizaciones sociales o solicitar la devolución del monto del ticket”.
Asimismo, facilitaron una dirección electrónica para las personas afectadas por el cierre del monumento, principal atractivo turístico de Perú y declarado Patrimonio de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) en 1983.
Esta suspensión se da después de que manifestantes bloquearan el acceso al ferrocarril entre Cuzco y Machu Picchu, quienes también atacaron los aeropuertos de Arequipa, Cuzco y la ciudad meridional de Juliaca, asestando un nuevo golpe a la industria turística peruana.
Los disturbios, que hasta esta semana se concentraban en el sur del país, han llevado al gobierno a extender el estado de emergencia a seis regiones, restringiendo algunos derechos civiles hasta el cese de los bloqueos.
Con información de Reuters