El canciller Marcelo Ebrard informó sobre la audiencia programada para el 24 de julio, donde México presentará sus argumentos en su apelación a la sentencia que desestimó la primera demanda contra empresas de armas en Estados Unidos. El objetivo de México es reducir la violencia y las muertes mediante la disminución del flujo de armas provenientes del país vecino.
En marzo pasado, México interpuso un nuevo recurso para revertir el rechazo de la demanda presentada en 2021 contra ocho fabricantes estadounidenses de armas. La demanda se basa en la negligencia de estas empresas que facilitan el acceso de armas a los cárteles de la droga a través de la frontera entre ambos países.
A pesar de que las armerías alegaron inmunidad procesal bajo la Ley de Protección del Comercio Legal de Armas, el juez de distrito en Boston, F. Dennis Saylor, desestimó las denuncias de México contra las empresas acusadas. El juez argumentó que la ley federal prohíbe responsabilizar a los fabricantes de armas cuando estas se utilizan para su propósito previsto.
México sostiene que aproximadamente el 2.2% de las casi 40 millones de armas fabricadas anualmente en Estados Unidos se introducen ilegalmente en el país, incluyendo un número significativo proveniente de los acusados. El contrabando de armas ha contribuido a que México ocupe el tercer puesto mundial en muertes relacionadas con armas, además de causar impactos negativos en la inversión, la actividad económica y los gastos en seguridad pública.