El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó que la tasa de inflación general mexicana descendió en la primera quincena de abril, llegando a un 6.24%. Esta disminución se debió a la caída de precios en energéticos y productos agropecuarios, y representa seis quincenas consecutivas de descenso.
Este dato es inferior a las expectativas del mercado y se presenta después de que la inflación cerrara el 2022 con un aumento del 7.82%, la mayor subida en 22 años y en lo que va del siglo.
El Inegi detalló que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) tuvo una disminución del 0.16% en comparación con los 15 días anteriores. Además, en la misma quincena del año anterior, la inflación quincenal fue del 0.16% y la anual del 7.72%. El índice de precios subyacente, que elimina los artículos de alta volatilidad en sus precios, tuvo un aumento del 0.18% quincenal y del 7.75% anual. Por otro lado, la partida de no subyacentes disminuyó un 1.22% a tasa quincenal, pero aumentó un 1.82% interanual.
Los precios de las mercancías aumentaron un 0.31% en la quincena y un 9.73% en el año, mientras que los servicios avanzaron un 0.03% quincenal y un 5.42% anual. En cuanto a los no subyacentes, los precios de los agropecuarios decrecieron un 0.07% respecto al periodo anterior, pero aumentaron un 5.61% en comparación con el mismo lapso del año pasado. En cambio, los energéticos y tarifas autorizadas por el Gobierno disminuyeron un 2.18% en la quincena y un 1.21% en el año.
A pesar de esta disminución en la inflación, el dato de la primera mitad de abril significa más de 50 quincenas consecutivas en las que la inflación está por encima del rango objetivo del Banco de México (Banxico), que es del 3%. Esta cifra se publica después de la nueva política monetaria del banco central, que ha elevado 15 veces la tasa de interés hasta un récord de 11.25%.