Covid en China: compras “de pánico” y test masivos en Pekín ante el repunte de casos y el miedo a un nuevo confinamiento.
Pekín, la capital de China, registra un aumento de casos del virus y ya se han empezado a cerrar algunas urbanizaciones para evitar su propagación.
Solo en el fin de semana, el distrito de Chaoyang, el más poblado de la capital y que concentra desde embajadas hasta rascacielos corporativos, ha reportado 26 casos, el número más alto hasta ahora en esta última oleada. Se ha exigido a quienes vivan o trabajen en la zona que se sometan a tres pruebas de ácido nucleico durante esta semana.
Y, a pesar de que el gobierno ha ofrecido garantías de que habrá suficiente comida, la gente se ha lanzado a las tiendas en busca de provisiones.
En el aire está el temor a que Pekín se pueda enfrentar a una situación similar a la de Shanghái, que lleva ya varias semanas bajo confinamiento estricto.
Ni carne, ni huevos ni gambas
En Chaoyang se concentran los mayores temores ante el aviso del equipo de prevención de enfermedades de la ciudad de las rondas de pruebas masivas a las que deberán someterse sus habitantes.
La noticia hizo que los residentes corrieran a abastecerse de suministros esenciales. Las imágenes que empezaron a circular en los medios locales mostraban los estantes de los supermercados vacíos y largas colas en los mostradores para pagar.
Ante el aumento de la demanda, los principales supermercados de Pekín han ampliado sus horarios de apertura.
“La gente en Pekín está viendo los confinamientos en Shanghái, la falta de comida y de medicamentos. Y aunque no se sabe si Pekín tendrá unas medidas similares, la gente se está poniendo nerviosa dada la experiencia de lo que ha pasado”, apunta el corresponsal de BBC en China, Stephen McDonell.
Algunas personas en áreas cerradas de Shanghái dicen que están teniendo dificultades para acceder a los suministros de alimentos y se han visto obligados a esperar a que el gobierno les entregue verduras, carne y huevos.
“Nunca pensé que iría al mercado tan temprano por la mañana… Cuando llegué, todos los huevos y gambas habían desaparecido y toda la carne había sido saqueada”, dijo un usuario de Weibo -una red social usada en China-, en Shanghái, antes de agregar que logró conseguir algunas verduras.
Otro usuario de Weibo en Shanghái dijo: “Ver a la gente en Pekín apresurarse a comprar comida es divertido y angustiante. Es ver cómo era mi propia vida el mes pasado”.
El medio estatal de noticias The Global Times dijo que se ordenó a las compañías de alimentos frescos de Pekín que aumenten el suministro de comestibles como carne, huevos de aves y verduras.
También citaron a expertos en salud diciendo que los resultados de las pruebas masivas indicarían si es necesario intensificar aún más las medidas, como bloquear varias áreas de la capital.
Por otra parte, Pang Xinghuo, subdirector del Centro de Prevención y Control de Enfermedades de Pekín, dijo al medio de comunicación estatal China Daily que se espera que la cantidad de casos en Pekín aumente en los próximos días.
El último brote en Shanghái, detectado por primera vez a fines de marzo, ha registrado más de 400.000 casos hasta ahora y 138 muertes.
Fuente: bbc.com