La tan esperada secuela de Aquaman, titulada “Aquaman y el Reino Perdido”, ha recibido críticas desfavorables que señalan su desafortunado destino en la última entrega del Universo Extendido de DC (DCEU). Desde aspectos como el montaje, el guion, los efectos especiales hasta las actuaciones, la producción parece no haber logrado satisfacer a la audiencia y a los críticos, marcando un cierre amargo para la franquicia.
Las críticas comenzaron temprano, vinculando el proyecto con controversias que incluyen disputas legales entre Amber Heard y Johnny Depp, así como acusaciones de conducta inapropiada por parte de Jason Momoa en el set. A estos desafíos se sumaron las complicaciones derivadas del COVID-19, huelgas en Hollywood y reinicios en el DCEU, lo que contribuyó a la falta de optimismo en las proyecciones de taquilla.
El director James Wan demostró su compromiso al decidir estrenar la película en cines, a pesar de las adversidades. Según Deadline, se espera que la recaudación alcance los 40 millones de dólares durante su primer fin de semana en 73 países, lo cual es considerado positivo para un largometraje con un presupuesto de 72 millones de dólares.
Las críticas ofrecen un vistazo desalentador sobre “Aquaman y el Reino Perdido”. Peter Bradshaw de The Guardian lo describe como una secuela terrible que marca la decadencia de la franquicia, comparándola con “una bolsa de plástico desechada que va a asfixiar a la última vaquita marina que queda”.
David Ehrlich de IndieWire lo considera una secuela torpe y sombría que no logra igualar la delirante diversión de la película original de 2018. Robbie Collin de The Telegraph va aún más lejos al afirmar que la película es tan estúpida que parece estar matando neuronas a medida que avanza.
Nicholas Barber de BBC señala la falta de emoción, diversión o momentos conmovedores, atribuyendo gran parte del problema al montaje apresurado. Johnny Oleksinski de The New York Post destaca la aparente desinterés de DC Studios en la secuela y en el futuro del personaje, describiendo la película como “nada más que el final del antiguo DCEU; la pesadilla ha terminado”.
Con una calificación del 39% en Rotten Tomatoes, “Aquaman y el Reino Perdido” parece no haber cumplido las expectativas del público y los críticos. La película está actualmente disponible en cines a nivel internacional, pero las críticas aconsejan abordarla bajo su propio riesgo si se busca conocer el desenlace de la franquicia.
