Campeche, México – 4 de noviembre de 2023 – En una fascinante tradición que se ha mantenido a lo largo de los años, la celebración de ‘Hanal Pixán’ en Campeche reúne a familias enteras para honrar a sus seres queridos fallecidos a través de rituales que Incluyen el cambio de ropa y la limpieza de huesos en los cementerios locales.
Esta celebración, que tiene raíces profundas en la cultura mexicana, forma parte de las diversas maneras en que el país conmemora a los difuntos. Aunque el propósito es el mismo en todas las regiones de México, que es unir a las familias para dar la bienvenida a sus seres queridos que regresan del más allá, las festividades adquieren características distintivas en cada área geográfica.
Hanal Pixán, que en la lengua maya significa “comida de las ánimas”, es una tradición arraigada en la península de Yucatán y ha incorporado elementos de las creencias religiosas introducidas por los conquistadores. Esta celebración incluye la creación de altares que desempeñarán un papel central en la conmemoración.
Los altares, que constantes de tres partes, están adornados con elementos que simbolizan la conexión entre los vivos y los muertos. Incluyen una mesa cubierta con un mantel, una cruz verde que representa el “árbol de la vida” (la ceiba), incienso que guía a los difuntos hacia la comida con su luz y aroma, así como sal y agua que simbolizan la purificación. Un elemento culinario esencial en Hanal Pixán es el “Mucbipollo” o “pib”, un tamal relleno de carne de pollo y condimentado con ingredientes que solían gustar a los difuntos, cocinado bajo tierra en hornos llamados “muuk” en los patios de las casas. .
La tradición también incluye frutas, dulces, tamales de x’pelón, balché (una bebida embriagante) y jícaras de tan-chucuá (un atole de maíz, cacao, pimienta y anís).
Esta festividad se celebra durante tres días, ya que se cree que en este tiempo, las almas de los difuntos tienen permiso para visitar a sus seres queridos, disfrutar de los platillos ofrecidos y cambiar de ropa y calzado que les proporcionan los vivos.
El 31 de octubre, conocido como “u hanal palal”, está dedicado a los niños difuntos, y los altares se decoran con elementos como dulces, juguetes, velas de colores y flores.
El 1 de noviembre, llamado “u hanal nucuch uinicoob”, se dedica a los adultos difuntos, y los altares incluyen utensilios de trabajo, ropa y calzado para el viaje de regreso de los seres queridos difuntos.
El 2 de noviembre, llamado “u hanal pixanoob” o “misa pixán”, está destinado a los fieles difuntos y se celebran oraciones en el cementerio local. El altar suele ser más pequeño en este día.
La ofrenda varía según las posibilidades económicas de cada familia, sin reglas fijas. Las velas representan a quienes se dedican el altar, y se utilizan para invocar a los familiares difuntos y recordarles que son bienvenidos. La ofrenda incluye agua, atole y maíz.
Esta tradición es particularmente arraigada en las zonas rurales, donde la participación de toda la familia es común, con las mujeres preparando alimentos y creando los altares, mientras los hombres se encargan de los rituales como la preparación y cocción de los tamales en los hornos muuk. . Hanal Pixán sigue siendo una celebración viva y significativa en la vida de muchas comunidades en Campeche y en todo México.
