Una mujer de 48 años, identificada como Phoebe Copas, fue acusada este jueves de asesinar a su chofer de Uber, Daniel Piedra García. Según explicó la acusada, cometió el crimen al creer erróneamente que iba a ser secuestrada al ver una señalización cerca de la frontera que indicaba que se dirigían hacia Ciudad Juárez, en México.
El trágico incidente ocurrió el pasado 16 de junio en El Paso, Texas, cuando Copas, quien se encontraba de visita, solicitó un Uber para encontrarse con su novio en un casino. Sin embargo, al observar señales de tráfico con las palabras “Juárez, México”, la acusada supuestamente creyó que estaba siendo secuestrada y sería llevada al otro lado de la frontera, lo que la llevó a dispararle en la cabeza al conductor de origen latino.
Según documentos judiciales obtenidos por medios estadounidenses, Copas no contactó a la policía ni a los servicios de emergencia para informar que estaba en peligro antes de disparar presuntamente a Piedra.
Las autoridades aclararon que el lugar donde ocurrió el incidente no estaba cerca de un puente, puerto de entrada ni ninguna otra área con acceso inmediato para viajar a México. La familia de la víctima exige justicia a las autoridades, mientras que la sospechosa enfrenta cargos criminales y se le ha fijado una fianza de 1,5 millones de dólares, según informan medios estadounidenses.