Desde su lanzamiento en octubre de 2021, DiDi ha sido una de las varias plataformas de entrega y transporte compartido que ofrece un servicio de préstamo en la aplicación.
Uber Eats lo ha estado haciendo también durante al menos dos años, ofreciendo préstamos que van desde 2,000 pesos hasta 150 mil pesos a través de notificaciones automáticas, anuncios en la aplicación y mensajes de WhatsApp. Sin embargo, los expertos alegan que estos préstamos parecen ser trampas de deuda en un entorno en el que las plataformas han estado luchando con la retención de trabajadores.
Saúl Gómez Piña, repartidor y vocero de la organización de repartidores de base “Ni Un Repartidor Menos”, dijo que cuando alguien pregunta sobre estos préstamos de aplicaciones en cualquiera de los grupos de WhatsApp de la organización, los miembros se apresuran a advertir que no los acepten.
Uber Eats, Rappi y DiDi, las aplicaciones de entrega más grandes y populares de México, han publicado poca información sobre cuántos de sus trabajadores han recibido préstamos y por qué montos.
“Básicamente es una tienda de raya ”, dijo al medio Rest of World, Francisco Meré, expresidente de la Asociación Mexicana de Fintech y director ejecutivo de la empresa de bienestar financiero Uellbee, al señalar las similitudes entre las funciones de crédito de la aplicación y el antiguo sistema de establecimientos de crédito para el abasto básico, ubicadas junto a las fábricas o haciendas y donde los jornaleros eran obligados a realizar sus compras, a menudo obligándolos a trabajar más horas en caso de que no pudieran pagar.
Maximilian Murck, director general de Tec-Check, esencialmente una organización sin fines de lucro que funciona como un organismo de control del consumidor, dijo que no le sorprende que los repartidores se hayan vuelto en contra de estos préstamos. “Toda esta práctica pone a los trabajadores en una posición muy desventajosa mientras trabajan”, dijo. “La Secretaría del Trabajo de México debería investigar a fondo este tipo de préstamos”.
Por el momento, ninguna de las empresas involucradas ha declarado al respecto, sin embargo, en medio de crisis financieras y la inflación mundial, los trabajadores y usuarios ven los pequeños préstamos con intereses altos con recelo.
Con información de Rest of World
